Querido amigo del alma,
hay un hondo pesar
por la partida de “Pepita”
tu adorada madrecita.
Gran amiga de mi madre
y madre de ti, ¡entrañable amigo!
Quisiera estar allí contigo
para abrazarte y compartir
el dolor por la partida
de tu amada madrecita…
Su partida, que a todos entristece,
los que la queremos tanto,
los que la conocimos,
con cariño recordamos a “Pepita”
tan amorosa y carismática,
vivaz, llena de luz.
Ejemplar señora, esposa, madre, amiga…
Admirable mujer
que a todos cautivó.
Ella deja una gran familia
hecha con su honroso esposo
llena de grandes valores y principios.
Deja a mi entrañable amigo
que de ella todo heredó,
empezando por el carisma
y siguiendo con innumerables
valores y calidad humana.
Le damos gracias a Dios
por habérnosla prestado.
La partida de “Pepita”
consigo se llevó
la estoica mujer cansada por los años.
Pero dejó la esencia que perdura
en el alma de los que la conocimos
y esa llama sólo se apagará
cuando nos toque a nosotros la partida.
Que Dios te bendiga “Pepita”
y te guarde en su eterna gloria.
Tu recuerdo perdurará
en nuestras memorias
mientras existamos.
Tu amigo, “Chino Suárez”.
|